X-Men: Primera Generación

Ficha

Título original: X-Men: First Class
Duración: 130 min.
País: EEUU
Año: 2011
Género: Acción, Ciencia Ficción, Drama
Director: Matthew Vaughn
Productores: Gregory Goodman, Simon Kinberg, Lauren Shuler Donner, Bryan Singer
Guión: Ashley Miller, Zack Stentz, Jane Goldman, Matthew Vaughn
Música: Henry Jackman
Fotografía: John Mathieson
Montaje: Eddie Hamilton, Lee Smith
Reparto: James McAvoy, Michael Fassbender, Jennifer Lawrence, Kevin Bacon, Rose Byrne, January Jones, Álex González, Jason Flemyng, Zoë Kravitz, Nicholas Hoult, Caleb Landry Jones, Edi Gathegi, Lucas Til
Colaboración: Hugh Jackman

Crítica

Y atacamos de nuevo, ¡hoy con una de mutantes!

Esta última semana que he estado sin actualizar he estado dándole vueltas a esta crítica, pero el continuo devenir de exámenes y estudios ha conseguido reducir mi tiempo y mis ganas hasta dejarme a la pata coja y sin resistencia. Es terrible. Pero el mundo no se acaba. ¡Siempre quedarán más exámenes que hacer!  Así que toca ser fuertes, echarle paciencia y lanzarse a la crítica con una única idea en la mente: ¡Todo cambia! Como los humanos, que pronto nos convertiremos en Homo Sapiens Superior, dicen estos mutantes. O como mis textos, cuyo futuro cercano era empezar a acortarse para facilidad de los lectores, y cuya prueba de fuego era el texto de hoy.

Así que, orgulloso de no haberlo conseguido, pero sabiendo que la intención es lo que cuenta, ¡vamos allá con la crítica!

En el universo de los cómics, si una cosa no falta nunca son nuevas y, por lo general, buenas ideas. Y es que en un universo tan extenso y variado uno podría pensar,  terriblemente equivocado, que se encuentran infinidad de personajes y fórmulas para películas estupendas que fascinen tanto a pequeños deseosos de aventuras como a grandes que nunca dejaron de soñar. Todos hemos pensado eso, incluida la muy rentable industria del cine. Y todos nos hemos equivocado, especialmente la (a toda costa) rentable industria del cine.

Por eso, películas como esta nueva entrega de los X-Men, precuela y reinicio de la saga, hacen que uno recupere de algún modo la esperanza en los mutantes, así como en esa pequeña parte (o grande, allá lo que haga cada uno con su tiempo libre) que recuerda con orgullo aquellas páginas repletas de colores, historias y experiencias.

De una forma no especialmente innovadora, pero satisfactoriamente dinámica, la película nos cuenta los inicios de esta evolucionada raza de humanos, los mutantes, que por la propia evolución (no voy a hablar de la radiación, que se nos echan los medios encima del blog) han desarrollado desde apéndices que les permiten cosas tan fascinantes como volar, hasta superpoderes con los que dominar y alterar la realidad.

Presentando la primera generación de éstos y cómo formaron dos de sus grupos más importantes, nos encontramos en los años 60 inmersos en plena Guerra Fría, cuyo desarrollo influye y define en gran parte al enorme abanico de personajes y situaciones. Dentro de esto, la película trata con maestría la tortuosa amistad entre los dos mutantes líderes de dichos grupos: Charles Xavier (a.k.a. Profesor X)  y Erik Lensherr (Magneto), con un magnífico juego a lo ying-yang, explicando los orígenes y decisiones que los han llevado a ser lo que son y provocando en el espectador una empatía y un ambiente de confianza tan logrado que, a la hora de la verdad, cuesta tomar la decisión de quién está equivocado o de si realmente hay un malo en esta historia.

La trama se desarrolla con una estructura sencilla aunque bien montada, logrando enganchar y sin dejar escapar un bostezo, pero pecando para conseguirlo de poseer alguna incoherente conveniencia en la presentación de los poderes y un ritmo demasiado acelerado que no permite asimilar debidamente la profundidad de la escena ni la complejidad de los personajes. No sin cierta ironía, esto hace que el principal superpoder de la cinta se convierta en su mayor punto débil, al intentar abarcar con esfuerzo la numerosa cantidad de personajes que a la vez la hacen tan interesante, pretendiendo encontrar tiempo para mostrar los abundantes poderes de los que, por eso mismo, no consigue sacar todo el provecho y dejando en un segundo plano la retorcida e ingeniosa maquinación del villano de turno, muy bien elegido por cierto, que es interpretado con estilo por Kevin cara-de-malo Bacon y cuyo plan desgraciadamente no alcanza una fase ni medianamente avanzada , consiguiendo en todo caso meter más relleno que miedo.

Aun así, digno de mención es sin duda el trabajo del director Matthew Vaughn, que introduce un desarrollo muy fluido y un interesante juego de escenas que, incluso con un cierto toque humorístico, nos cuenta lo estrictamente necesario sin viñetas de más; respetando con honradez las anteriores entregas  mediante una primera escena más que memorable y algún que otro guiño que consigue emocionar, y que no comentaré para no reventar la sorpresa a todos aquellos espectadores que aún no la han visto y tengan intención de hacerlo (y que seguramente no se leerán esta entrada jamás… Y yo luego lloro).

Pero los grandes héroes nunca luchan solos. Es por esto que el director se acompaña de un elenco de actores muy bien situados en sus roles, que por lo ya comentado no tienen la ocasión de demostrar su máximo potencial,  pero que inspiran una fidelidad a sus personajes que acercan el film aún más a la realidad.

Cabe destacar del filón mutante por un lado a un vivaz y respetuoso James McAvoy, dando vida a Charles Xavier con un cierto aire travieso pero manteniendo a una altura nada fácil de mantener a la leyenda del admirable Profesor X. Y por otro lado y más destacable aún, al cada vez más presente (y con razón) Michael Fassbender, que con fuerza y maestría interpreta a un joven Erik Lensherr en pleno apogeo de su batalla interior pre-Magneto.

Fuera de este destacable pelotón, por desgracia, encontramos al español Alex González que, a pesar de todo y por muy orgullosos que estemos de su presencia en la película, su guión y relevancia en la cinta brillan por su ausencia.

Finalmente, envuelto en una banda sonora que acompaña con cumplimiento y una fotografía que ni falla ni destaca, todo elaborado con impactantes escenas y fórmulas habituales, el film se convierte en una satisfactoria película de entretenimiento y acción, simple y sin grandes revelaciones, pero de lo mejorcito con lo que últimamente nos tienen acostumbrados. Sabiendo donde atacar, mantiene cierta fidelidad a los cómics originales y deja con ganas de más, dando un halo de esperanza a una nueva saga de estos poderosos mutantes.

Muy recomendada para los que gusten de este género de cine, los que quisieran dar una segunda oportunidad a la saga o los que simplemente disfruten de una entretenida película del más puro estilo Hollywood.

Tras esto y dicho todo, hermanos mutantes, espero que os sintáis más orgullosos que nunca de la evolución de nuestra especie. Ahora podéis dar vuestra valoración de la película los que la hayáis visto y gustéis de hacerlo, y no olvidéis que podéis participar en la nueva encuesta así como seguir pensando vuestras 100 películas para ver antes de morir, que podéis añadir siempre que queráis aquí, mediante el correo o en la antesala.

¡Mutante, y a mucha honra!

Valoración del Cine de Pepe

Actores principales: 4
Reparto: 3.6
Banda Sonora: 3.2
Fotografía: 3.5
Dirección y producción: 3.6
Argumento y trama: 3.8
Nota total de la película por el Cine de Pepe: 3.7/5

Valoración de los Espectadores

Actriz principal: 4.5
Reparto: 3.5
Banda Sonora: 3.2
Fotografía: 3.7
Dirección y producción: 3.6
Argumento y trama: 3.3
Nota total de la película por los Espectadores: 3.6/5